Saber quién eres es esencial para alcanzar el estado más cercano a la felicidad. Tener un problema de identidad, en cambio, equivale a arrastrar un saco demasiado pesado; es un esfuerzo constante que lleva a adelgazar, perder ganas, pensamientos suicidas, pesimismos, etcétera.
¿Sabéis quiénes sóis? Pues sentíos afortunados.
?¿?¿?¿?¿?¿?¿?¿?¿?
Ahora mismo me estoy acordando de mi conjuro para eliminar las dudas. Y como todos los conjuros no funciona y las dudas siguen creciendo y multiplicándose. ¡Es tan dura la vida!
I-D-E-N-T-I-D-A-D. Hace unos años la perdí y me hicieron un molde especial para mí, para que pudiera desempeñar la tarea que se me había encomendado.A día de hoy creo que puedo decir que he vuelto a ser la que era, aunque siempre lleve sobre mi espalda el peso de muchos quereres forjados a base de engaños.
ResponderEliminarTodo sucede por algo, sólo es cuestión de saber el porqué y no cerrar los ojos a nada aunque sea negativo.
Gracias a tí por escribir y compartir tus palabras.
Como habrás comprobado me he puesto al día en tus entradas. He regresado a la realidad y al infierno del verano.
Ya veo que sí. ¿Has vuelto al infierno? Pronto llega el invierno, ya sabes. :)
ResponderEliminarEl infierno es Madrid. El infierno es soportar temperaturas de 40 grados.
ResponderEliminarEl cielo es Helmantica o Asturorum Regnum. El cielo es el otoño-invierno.
(Independientemente de que hayas quitado lo de los mensajes, debes dar a una opción de blogger para que te envíen automáticamente comentarios y los podrás recibir incluso a tu móvil)