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Economía de raíz humana: ricos y pobres

El otro día leí que, a pesar de la crisis, en España ha aumentado el número de ricos un 14%, lo que me irrita muchísimo y me parece terriblemente insoportable. ¿Cómo puede ser que crezca la riqueza de unos pocos cuando la gran mayoría se empobrece? ¿Cómo me hago yo mismo esta pregunta sabiendo que es lo que ha ocurrido siempre en la historia de la humanidad? Pero lo más curioso de todo es que aun habiendo sido esta la tónica general, esa que dice que siempre hay más pobres que ricos, la mayoría permite que esto siga sin verse alterado. Ni revoluciones ni guerras ni muertes ni huelgas... nada es capaz de cambiar de raíz el problema, ese tremendo desajuste humano que separa ricos de pobres con tanta brutalidad e injusticia. Antes hubo jefes de tribu, luego patronos, señores con grandes tierras, nobles, burguesía, grandes empresarios, monarcas... todo lo ha dictado el poder pecuniario mal repartido y las tradiciones fijas, las que parece que salen de los genes directamente y no hay movimiento humano opositor. 

El 94% de la riqueza mundial está en manos de pocos. El otro 6% se reparte entre la inmensa humanidad. El hambre, la pobreza, la escasez se expande por la epidermis de casi todos. Solo la vida misma parece hacer diferencias entre un rico y un pobre. Nadie como la señora de negro en la perfecta ejecución de su tarea. Allegados por igual los que viven por sus manos y los ricos. Anegados por el río de la muerte, que nunca falla, que siempre acierta. 

¿Cómo cambiar las raíces de este sistema idiota? Hasta ahora hemos fallado sin reparo. 
Y entretanto los ricos siguen siendo pocos; los pobres muchos, demasiados.

Esto no va a cambiar. Sentencioso sueno. Sentencioso soy. Además, puedo decirlo con la seguridad de que no me equivoco. Como la muerte en su labor, mi sentencia al respecto es perfecto en su ejecución. Ricos pocos habrá; pobres muchos, demasiados. Así se resume la economía humana en todas sus variantes. Así, nada más, simple y contundente, aburrida, estúpida, gilipollas, pestilente.

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