Me miro en el reflejo de la pantalla del ordenador cada vez que se oscurece la imagen del capítulo que estoy viendo de TWD y me pierdo en mi propia pupila. Este año trabajo por inercia, con ansiedad, desganado y me siento reconocible con cualquier otro menos conmigo mismo, uno de esos zombies de la serie que veo, sin conciencia, sin destino fijo, deambulando en solitario o en rebaño como ovejas, con las tripas colgando del vientre y la mirada perdida. Me miro y me da rabia estar perdiendo la ilusión que antes tenía. Y todo porque el mundo de la educación está cada día peor, el mundo de la política es cada vez más corrupto, qué lejos quedan los tiempos en que... a no, si el mundo político siempre ha estado igual, grupo de caballeros de la mesa redonda que se creen salvadores de la humanidad... y ya el remate es la elección de Trump o la reelección de Rajoy... ¿este es el ejemplo modélico que queremos que aprendan nuestros jóvenes? Hace tiempo hablé en este blog del poder del mie...
Las primeras palabras se plasmaron sobre piedra, quizás, estas de ahora las plasmo sobre las pantallas líquidas de vuestros ordenadores y teléfonos. Bienvenidos/as al espacio donde mis palabras tienen lugar.